
En medio de una jornada marcada por las tensiones políticas y las especulaciones electorales, el Senado de la Nación se prepara para votar el proyecto de Ficha Limpia, una propuesta que impediría que personas condenadas en segunda instancia por delitos de corrupción puedan presentarse a cargos electivos o asumir funciones jerárquicas en el Ejecutivo.
El oficialismo necesita 37 votos afirmativos para convertir el proyecto en ley. Aunque enfrenta el rechazo explícito de los 34 senadores de Unión por la Patria, que acusan a la norma de representar una “intromisión del Poder Judicial en la política”, el respaldo de bloques provinciales podría inclinar la balanza a favor del Gobierno.
Sin embargo, la sesión —que también contempla la declaración de emergencia en Bahía Blanca para el envío de recursos extraordinarios tras el reciente temporal— estará atravesada por rumores sobre las verdaderas intenciones de la Casa Rosada. Algunos trascendidos aseguran que, pese a la voluntad oficial de tratar el proyecto, la prioridad política no sería su aprobación.
En ese sentido, analistas apuntan a un posible cálculo electoral: si Ficha Limpia se convierte en ley, Cristina Fernández de Kirchner —principal figura opositora del kirchnerismo— podría quedar fuera de una eventual candidatura nacional. Esta situación complicaría la estrategia de polarización de Javier Milei y su espacio, La Libertad Avanza, que en el balotaje logró atraer votantes del “centro” más por oposición al kirchnerismo que por convicción libertaria.
Otros sectores del oficialismo, en cambio, temen que la aprobación del proyecto refuerce la figura de Silvia Lospennato, diputada del PRO y principal impulsora de la propuesta, quien se perfila como una de las candidatas en la Ciudad de Buenos Aires. En ese distrito, el enfrentamiento con la lista libertaria será clave para captar al electorado de centro-derecha.
El proyecto de ley establece la inhabilitación para postularse a cargos electivos o desempeñarse como funcionario del Ejecutivo para aquellas personas condenadas en segunda instancia por delitos dolosos vinculados a la corrupción. Esto incluye figuras como cohecho, tráfico de influencias, malversación de fondos públicos, enriquecimiento ilícito, entre otros.
La exclusión aplicaría únicamente si la condena es ratificada por un tribunal superior antes del cierre del padrón electoral, es decir, al menos 180 días antes de la elección general, según establece el artículo 25 del Código Electoral Nacional.
Actualmente, la Ley de Partidos Políticos ya contempla ciertas restricciones, pero se limita a quienes están excluidos del padrón electoral por disposición legal. La Ficha Limpia busca ampliar ese margen de exclusión, incluyendo a quienes hayan sido condenados en segunda instancia, sin esperar una sentencia firme.
La sesión de este miércoles se presenta como un punto de inflexión no solo legislativo, sino también político. Mientras el reloj electoral avanza, el resultado de la votación podría marcar un antes y un después en el diseño de las campañas y en el perfil de los candidatos habilitados a competir.