
En su estreno en el Mundial de Clubes 2025, Boca Juniors protagonizó un verdadero partidazo frente a Benfica de Portugal por el Grupo C. En un arranque demoledor, el conjunto argentino se puso en ventaja a los 27 minutos del primer tiempo con goles de Miguel Merentiel y Rodrigo Battaglia, de cabeza, capitalizando dos de las tres situaciones claras que generó en el inicio, pese a la mayor tenencia del balón por parte del equipo europeo.
Sin embargo, la diferencia inicial comenzó a diluirse antes del descanso. Un infantil penal de Carlos Palacios sobre Nicolás Otamendi —tras un córner desde la derecha— fue sancionado tras revisión del VAR por el árbitro mexicano César Ramos. Allí apareció Ángel Di María, con un toque sutil, para descontar y establecer el 2-1 con el que se fueron al entretiempo.
El complemento arrancó con Benfica presionando en busca del empate. Los cambios tácticos de ambos entrenadores modificaron el trámite del partido, pero el encuentro volvió a cargarse de dramatismo a los 26 minutos, cuando el italiano Andrea Belotti vio la tarjeta roja directa por una peligrosa patada en la cabeza a Ayrton Costa.
Pese a jugar con un hombre menos, Benfica no se resignó y logró el empate agónico a través de un cabezazo de Nicolás Otamendi sobre el final. Minutos después, el árbitro expulsó a Jorge Figal de Boca, dejando a ambos equipos con diez jugadores antes del pitazo final que selló el 2-2 definitivo.
Tras el empate, Boca Juniors deberá afrontar ahora un desafío de máxima exigencia: el viernes 20 de junio enfrentará a Bayern Múnich en el Hard Rock Stadium de Miami, desde las 22 (hora argentina). El equipo alemán, dirigido por Vincent Kompany, llega como reciente campeón de la Bundesliga y presenta un plantel estelar liderado por figuras como Harry Kane, Joshua Kimmich, Michael Olise y el histórico Thomas Müller. Sin embargo, los bávaros no contarán con Alphonso Davies, Dayot Upamecano ni Leroy Sané.
El recuerdo de la última vez que Boca y Bayern se enfrentaron en un partido oficial aún resuena en la memoria del hincha xeneize. Fue en la Copa Intercontinental 2001, cuando el conjunto alemán se impuso 1-0 en un polémico encuentro signado por el discutido arbitraje del danés Kim Nielsen, en un duelo donde el entonces ídolo y actual presidente de Boca, Juan Román Riquelme, fue duramente castigado por las infracciones no sancionadas.
Luego de enfrentar al Bayern, Boca cerrará la fase de grupos el martes 24 de junio ante Auckland City de Nueva Zelanda en el GEODIS Park de Nashville, desde las 16 (hora argentina).