En las elecciones legislativas del Reino Unido, los laboristas lograron una victoria aplastante este jueves que pondrá fin a 14 años de gobierno conservador. Keir Starmer será próximo primer ministro por la victoria de los laboristas que obtendrían unos 410 escaños de los 650 en disputa en la Cámara de los Comunes, con una holgada ventaja sobre los conservadores del primer ministro Rishi Sunak que obtendrían 131.
Si se confirma esta cifra, sería el peor resultado conservador en unas elecciones desde la fundación del partido en 1834, por debajo de los 156 logrados en 1906, su anterior peor registro. Mientras continúa la madrugada de este viernes el recuento de votos, los laboristas se aseguraron la mayoría absoluta, para lo que se necesitaba llegar a 326 escaños, después de alcanzar la cifra de 340 disputados.
Algunas encuestas ponían en duda su reelección como diputado, el líder conservador, Rishi Sunak, conservó su escaño al imponerse en su circunscripción, en Richmond, en el norte de Inglaterra. “El Partido Laborista ha ganado estas elecciones. Los británicos dieron un veredicto claro y asumo la responsabilidad. Hoy, el poder cambia de manos, de manera pacífica y ordenada con buena voluntad de todas las partes”, dijo Sunak.
El líder conservador deja el cargo menos de dos años después de haber sido nombrado primer ministro, en octubre de 2022, cuando asumió tras un desastroso mandato a nivel económico, de apenas 49 días, de Liz Truss, que había sustituido a Boris Johnson, envuelto en el escándalo de las fiestas en su residencia oficial durante la pandemia de Covid-19.
El Partido Conservador, con luchas internas y sumido en una profunda crisis, estaba en el poder desde mayo de 2010, primero con David Cameron como primer ministro, seguido por Theresa May y luego Johnson.