
La aparición de un murciélago con rabia encendió las alarmas en la ciudad y motivó la activación de un protocolo sanitario urgente. El hallazgo ocurrió el pasado viernes por la noche y fue confirmado por el área de Zoonosis municipal, encabezada por Guillermo Beltrán, quien destacó la rapidez con la que se desplegó el operativo preventivo.
“Activamos el protocolo urgente, como se requiere en estos casos”, señaló Beltrán. El operativo incluyó un refuerzo de vacunación antirrábica en un perímetro delimitado por las calles Patagonia, Fourmantin, Muster y Lorenzo Martínez, donde se procedió a vacunar de manera preventiva a todos los perros y gatos del sector.
Los equipos municipales trabajaron casa por casa, aplicando dosis y brindando información esencial para prevenir la enfermedad. A quienes no se encontraban, se les recomendó acercarse con sus mascotas a la sede de Zoonosis, ubicada cerca del Hospital Pedro Ecay.
La campaña contó con el respaldo de especialistas llegados desde Azul, con experiencia en el tratamiento de zoonosis de alto riesgo. “Es una enfermedad que requiere atención inmediata. No se puede esperar”, advirtió Beltrán.
La rabia es una enfermedad viral grave, que se transmite a través de la saliva de animales infectados, habitualmente por mordeduras. Aunque es poco frecuente en mascotas vacunadas, su presencia en la fauna silvestre representa un riesgo constante.
Desde el área de Zoonosis recordaron que la vacunación antirrábica es anual y obligatoria para todos los perros y gatos a partir de los tres meses de edad. Además, instaron a la comunidad a evitar el contacto con animales silvestres y a reportar cualquier comportamiento inusual en murciélagos o mascotas.